Los orígenes del Castaño de India

El Ccastaño de Indias es conocido como árbol ornamental en parques, jardines y bulevares. Con sus hermosas flores y su denso dosel de hojas en verano, es un árbol característico de los patios cerveceros alemanes, donde antiguamente ayudaba a mantener frescas las bodegas.

Nativo de la península de los Balcanes, la República de Turquía y Turkmenistán. Ampliamente distribuido por toda la zona templada, incluidas Europa, América del Norte, partes de Rusia y la Isla Sur de Nueva Zelanda.

El nombre del género Aesculus tiene sus raíces en el latín “esca”, que significa «alimento». Curiosamente, los romanos usaron este nombre para una especie de roble (Quercus aesculus), pero no está claro por qué el nombre se transfirió al Castaño de Indias. El nombre vulgar se deriva del nombre de la especie botánica hippocastanum, que significa «castaño de indias» en griego antiguo.

Se han propuesto varias teorías sobre el origen del nombre del árbol. Sin embargo, la explicación más citada está relacionada con la forma en que llegó a Europa occidental. En 1557, el botánico y médico Willem Quackelbeen (1527-1561), que residía en Constantinopla (actual Estambul), describió en una carta a su colega, el médico botánico italiano Pietro Andrea Mattioli (1501-1577), cómo en las callejuelas de la ciudad se plantaron estos interesantes árboles, cuyas semillas, los turcos utilizaban para alimentar a sus caballos, de tres a cuatro a la vez y aliviar la tos, la dificultad para respirar y los parásitos intestinales de los animales. Mattioli recibió un espécimen de semilla y hoja de castaño de indias junto con la carta y, basándose en la descripción de Quackelbeen, llamó al árbol Castanea equina, siendo equus el nombre latino que significa caballo. El médico procedió a realizar un grabado en madera del árbol, que fue la primera ilustración impresa del castaño de Indias en Europa y lo incluyó por primera vez en su herbario. A partir de entonces, el castaño de indias apareció en los herbarios europeos.

El director del jardín botánico de Viena, Carolus Clusius (1526-1609), fue clave para la posterior distribución del Castaño de Indias en Occidente enviando semillas a sus parientes en todo el continente. En el siglo XVII, este árbol se cultivaba ampliamente en toda Europa como ornamental y se hicieron esfuerzos considerables para encontrar usos para sus abundantes semillas. Estos usos incluían forraje para el ganado, que se decía que enriquecía mucho la leche.

Es importante destacar que, debido a los compuestos tóxicos, las semillas debían remojarse en agua de cal, lavar y hervir antes de que fueran comestibles. Otras aplicaciones incluyeron la creación de pegamento resistente a la putrefacción, utilizado por los encuadernadores para un tablero adhesivo de herbarios y, la sustancia saponácea liberada por las semillas hervidas y remojadas en agua que sustituyó, al jabón y se usó para blanquear el cáñamo, lino y lana.

Curiosamente, Barton y Castle (1845) también informaron que, como tinte para la lana, las hojas producen un color marrón castaño pálido, mientras que la corteza produce un color amarillo. Las saponinas son excelentes tensioactivos y las castañas de indias todavía se usan hoy en día para hacer un detergente para ropa sin desperdicio y dermatológicamente bien tolerado.

Las plantas medicinales son increíbles, efectivas y actúan de manera integral, pero debemos tener en cuenta detalles que muchas veces se pasan por alto.

Este Ebook que te brindará información CLAVE para que puedas trabajar con fitoterapia de una manera segura y eficiente. 

QUIERO EL EBOOK

Características botánicas del Castaño de India

Es un árbol grande, de hoja caduca y ancha, con una copa ovalada muy extendida que puede crecer hasta los 39 m de altura. El tronco puede medir hasta 190 cm de diámetro y está cubierto con una corteza de color marrón grisáceo oscuro que se vuelve escamosa con la edad, mientras que las ramitas son de color gris pálido a marrón, lisas y cubiertas con lenticelas pálidas. Los cogollos resinosos miden entre 2,5 y 5 cm, son de color marrón rojizo y son muy pegajosos. Las hojas opuestas, palmadas, de color verde oscuro, pueden crecer hasta 60 cm de ancho y tener un pecíolo largo; mientras que cada hoja consta de 5 a 7 folíolos irregularmente dentados que miden entre 8 a 25 cm de largo.

Las grandes inflorescencias piramidales son andromonoicas, lo que significa que el árbol produce flores masculinas en la parte superior de la panícula y flores hermafroditas debajo. Las flores de 2 cm son zigomorfas, tienen un plano simétrico, con cinco sépalos que forman un cáliz tubular dentado y pétalos blancos decorados con manchas basales amarillas que se vuelven rosadas. Solo unas pocas flores basales de cada inflorescencia desarrollan el fruto espinoso casi en forma de globo (5-8 cm) que contiene de una a tres semillas. Las semillas de color marrón rojizo son brillantes, lisas y con una gran marca blanca, que es el hilio o punto de unión.

El Castaño de Indias no está emparentado con el castaño vulgar, pero produce unas semillas similares a las de este. Estas castañas, algo más aplanadas que las comunes, constituyen su parte medicinal, juntamente con las hojas y la corteza.

Las poblaciones silvestres de árboles están en peligro de extinción en Bulgaria y Grecia, y en peligro crítico de extinción en Albania. En su región nativa, tanto los árboles cultivados como los silvestres han sido frecuentemente infestados por el minador de hojas del Castaño de Indias (Cameraria ohridella), una especie invasora que causa el oscurecimiento temprano de las hojas seguido de defoliación y debilitamiento de los árboles, lo que puede interferir con la reproducción de los árboles en poblaciones naturales.

Las semillas del Castaño de Indias caen al suelo cuando maduran a principios de otoño y se pueden recolectar fácilmente. Sin embargo, la síntesis de saponinas y flavonoides varía durante la maduración de la semilla. Un estudio demostró que el mayor contenido de compuestos activos se midió entre las 13 y 16 semanas del inicio de la floración y que la escina aumentó un 90% entre las 12 y 20 semanas, y los flavonoides un 120% entre las 7 y 12 semanas después de la floración. Para facilitar el proceso de secado, las semillas se retiran de su envoltura espinosa, se parten o se pican en trozos pequeños y se secan a una temperatura de hasta 45°C.

A las ramas jóvenes se les suele quitar la corteza. Sin embargo, el contenido de esculina es mayor en la corteza madura; al cosechar de cualquier árbol es importante tener en cuenta la salud del árbol y nunca cosechar del tronco, sino optar por ramas más pequeñas. La corteza se cosecha en la primavera antes de que comience el flujo de savia y se puede secar extendiéndose en una sola capa sobre mallas almacenadas en una habitación bien ventilada a un máximo de 50 °C o secando a la sombra.

Propiedades medicinales del Castaño de Indias

Este majestuoso árbol es, también, valorado tanto en herboristería como en medicina tradicional. La escina, el principal principio bioactivo de las semillas, todavía se extrae del Castaño de Indias a escala industrial para sus aplicaciones farmacológicas. Dicho extracto está indicado interna y tópicamente para la insuficiencia venosa crónica (IVC), una afección en la que se inhibe el flujo sanguíneo desde las venas de las piernas hasta el corazón y se caracteriza por edema, varices, piernas pesadas, dolor o calambres, picazón y/o cambios en la piel de las piernas.

Casi todas las partes del Castaño de Indias se aplican en la herboristería tradicional, pero son las semillas y la corteza las que se utilizan, principalmente. Las diferentes partes de las plantas se caracterizan por una clase dominante de compuestos bioactivos; escina, una mezcla compleja de saponinas que se encuentran en las semillas, flavonoides en las hojas y flores y glucósidos cumarínicos como la esculina y la fraxina en la corteza. Muchas de las propiedades bioactivas de las semillas se atribuyen a la escina y sus propiedades antiinflamatorias, antiedematosas, antioxidantes y tónicas vasculares están bien establecidas.

El género Aesculus incluye hasta 25 especies nativas de América del Norte, los Balcanes, el este de Asia y la India. El Castaño de Indias no está relacionado con el castaño comestible (Castanea sativa) y sus semillas crudas son astringentes y no deben consumirse debido a sus principios tóxicos. El nombre popular «castaño de indias» se aplica a menudo a otras especies del género Aesculus, incluido el A. californica y el A. glabra. Sin embargo, si bien algunos de los compuestos bioactivos están comúnmente presentes en varias especies del género Aesculus, no deberían sustituir a A. hippocastanum, ya que algunas especies, como A. glabra, se consideran altamente tóxicas para la salud en humanos y animales.

En su área de distribución nativa, el castaño de indias europeo se aplica, principalmente, para problemas relacionados con la insuficiencia venosa y las hemorroides. En la herboristería tradicional de la provincia de Düzce en Turquía, las semillas peladas y trituradas se mezclan con agua y se toman internamente para los resfriados, el dolor de estómago, el dolor de muelas y el estreñimiento, mientras que en la provincia de Amasya se utiliza una decocción de las semillas para la arteriosclerosis. En Bulgaria, las semillas molidas se mezclan con Rakia, un brandy local elaborado con uvas o ciruelas, y se aplican sobre la piel para aliviar los dolores reumáticos y la ciática, mientras que las hojas frescas batidas están indicadas para las úlceras y la gota. En Grecia, se han registrado varios usos, entre ellos para la disentería, las úlceras y forúnculos, el reumatismo y la tuberculosis.

El Castaño de Indias se utilizaba para la predicción meteorológica en algunas regiones. Por ejemplo, en Gales se decía que las hojas se extendían como un abanico cuando llegaba el clima cálido y apuntaban hacia abajo cuando se esperaba lluvia. Mientras que en Bulgaria, si el árbol florece por segunda vez en el mismo año, se avecina un invierno largo y severo.

Otras prácticas mágicas registradas en varios países, incluidos Inglaterra y América del Norte, giran en torno a llevar una semilla de Castaño de Indias en el bolsillo para prevenir o aliviar el reumatismo. Se creía que la “energía negativa” era absorbida por la semilla. No está claro de dónde viene esta práctica, pero puede tener sus raíces en la doctrina de las signaturas, tal vez la gente vio un parecido entre las castañas y los nódulos reumatoides.

La escina y otros extractos de este árbol se utilizan habitualmente en cosmética. Sus propiedades tonificantes y astringentes lo convierten en un aditivo frecuente en champús, pediluvios espumosos y diversos geles y ungüentos para la rosácea, la celulitis y la caída del cabello. A su vez, jugó un papel importante en el desarrollo de protectores solares. En 1911, el Dr. Unna, un dermatólogo alemán, desarrolló una pasta espesa que contenía derivados de esculina, utilizada para interceptar y filtrar la radiación ultravioleta. La radiación solar ultravioleta (UV) es responsable del aumento de la producción de especies celulares reactivas de oxígeno que pueden provocar daños en el ADN. Se sabe que los preparados de Castaño de Indias contienen altos niveles de compuestos antioxidantes.

Tradicionalmente, varias partes del Castaño de Indias se han aplicado para afecciones gastrointestinales, incluida la diarrea, para aliviar el dolor causado por afecciones como neuralgia, reumatismo y dolores musculares, así como flebitis, hemorroides y agrandamiento de la próstata.

En la herboristería moderna, los preparados de esta generosa planta son valorados por sus acciones vasculares protectoras y venotónicas y están indicados en problemas venosos para edemas de miembros inferiores y como anti equimótico, en aplicaciones externas para aliviar hematomas o reducir la hinchazón en hematomas. Sus propiedades antiinflamatorias y analgésicas se descubrieron a principios del siglo XX y, desde entonces, se utiliza ampliamente para la insuficiencia venosa crónica (IVC).

Los investigadores sugieren que los preparados de Castaño de Indias pueden resultar útiles como una buena alternativa al uso de medias de compresión. Se cree que sus compuestos activos actúan sinérgicamente en IVC; las propiedades antiinflamatorias de los flavonoides, los taninos astringentes para ayudar a fortalecer las paredes de los vasos y la saponina escina pueden aumentar el tono venoso al inhibir las enzimas elastasa y hialuronidasa, que se elevan en personas con IVC.

Las semillas de este árbol aumentan la circulación y mejoran el tono de las venas al combinar una fuerte estimulación de calentamiento con astringencia. Se describe al árbol como una hierba clásica para la congestión venosa pasiva, donde las venas están agrandadas y llenas de sangre que no puede fluir libremente a través de ellas. Esta mala circulación puede provocar tensión neuromuscular, flebitis en las piernas, hemorroides, hígado congestionado y congestión pélvica y uterina y puede hacer que el corazón bombee con más fuerza, lo que provoca presión arterial alta. En ocasiones, esto también va acompañado de problemas asmáticos debido a la estasis en las venas pulmonares. Además, se sugiere combinar el Castaño de Indias astringente, picante y estimulante con Collinsonia y Hamamelis para las hemorroides y los problemas venosos y cardíacos.

La aplicación popular en las hemorroides podría explicarse por el contenido de flavonoides de las preparaciones, que según algunos estudios reducen el sangrado, el dolor y la picazón asociados con la afección y disminuyen el riesgo de síntomas persistentes.

Según la doctrina de las signaturas, el Castaño de Indias simboliza el autocontrol, la luz en la oscuridad, la seriedad y la alegría y se puede aplicar cuando los pensamientos dan vueltas y vueltas y la falta de guía interior provoca molestias físicas. Sus preparados son útiles cuando no hay espacio entre los pensamientos, especialmente, cuando esto se refleja en el pulso, donde parece que no hay suficiente espacio entre los latidos del corazón. Esto es un claro signo de tensión mental y presión arterial alta.

La corteza de este árbol se aplica, tradicionalmente, de forma externa en baños o compresas para las molestias y pesadez en las piernas por insuficiencia vascular menor, e internamente para reducir la diarrea. En la herboristería tradicional de varios países, incluidos Bulgaria, Rusia y Gales, se utiliza una decocción hecha con corteza y, a veces, hojas, para las venas varicosas y, también, para hacer supositorios para las hemorroides.

Curiosamente, si bien a menudo se atribuyen propiedades venotónicas a la escina, la corteza, que sólo contiene trazas, también, se utiliza en afecciones relacionadas con la insuficiencia vascular. Sin embargo, su mecanismo de acción está menos investigado. La eficacia de la corteza se atribuye a su contenido polifenólico con un papel de apoyo de los glucósidos cumarínicos, de los cuales el primero tiene una fuerte actividad antioxidante y, a su vez, trabaja en otras preparaciones vasoprotectoras como el extracto de semilla de uva. Además, el estrés oxidativo creado por demasiados radicales libres en el cuerpo y los trastornos de la hemostasia relacionados con la inflamación a menudo ocurren simultáneamente con daño vascular, incluidas venas varicosas y hemorroides.

Por otro lado, en diversos estudios se han demostrado las propiedades antibacterianas de los compuestos activos del Castaño de Indias. La investigación in vitro ha demostrado que la β-escina inhibe significativamente las bacterias grampositivas Staphylococcus epidermidis y S. aureus de una manera dependiente de la concentración.

Precauciones y contraindicaciones al consumir Castaño de Indias

Las preparaciones de semillas y corteza de Castaño de Indias, generalmente, se consideran seguras para los adultos cuando no se excede la dosis diaria recomendada. Si bien los preparados suelen ser bien tolerados, durante los estudios clínicos se han observado algunos casos de efectos secundarios como dolor de cabeza, molestias gastrointestinales, vértigo, picazón y reacciones alérgicas.

Las personas con tromboflebitis, piernas hinchadas e inflamación, afecciones para las que tradicionalmente está indicado el castaño de indias, deben consultar a un profesional de la salud antes de utilizar preparados de Castaño de Indias, especialmente, cuando padecen insuficiencia cardíaca o renal.

No se deben utilizar preparados en piel rota y/o ulcerada y aquellas personas con enfermedad celíaca, mala absorción de grasas, deficiencia de vitaminas A, D, E y K y colestasis deben evitar este árbol, debido a la gran cantidad de saponinas. No se recomienda su uso durante el embarazo y la lactancia, así como en niños y adolescentes, ya que no se ha establecido la seguridad.

Además, las preparaciones de esta planta son anticoagulantes y pueden provocar un mayor riesgo de hemorragia cuando se usan en combinación con warfarina u otros fármacos anticoagulantes y antiplaquetarios.

Los casos de intoxicación en humanos son raros, pero se han informado cuando las semillas se confundieron con castañas comestibles y después de la ingestión nasal de rapé de Castaño de Indias en polvo.

Formas de uso y dosis del Castaño de Indias

Puede emplearse por vía interna y externa.

Al tratarse de vía interna, se toma en decocción de las semillas o la corteza, en infusión de las hojas, en extracto líquido solo o con otras plantas y en cápsulas.

Las dosis más habituales son:

• Decocción: 1-2 g/día de semilla seca; 275 mg de corteza, 3 a 6 al día.
• Tintura (semilla seca): 1-4 ml (1:5 en 40%), 3 veces al día

En el caso de vía externa se aplica la decocción en lavados de asiento, los emplastos de hojas frescas o bien preparados de herbolario y farmacia tipo supositorios, pomadas, geles o cremas, con extracto de escina.

¿Conocías este maravilloso árbol?

Cuéntame si ya habías incorporado sus propiedades en infusiones u de otras formas, #ComunidadFlorecer te lee 🙂

Si deseas conocer más sobre las contraindicaciones de las plantas medicinales y cómo interactúan con los medicamente entonces este EBOOK es para ti.

Flor.