Arcillas, Medicina de la Tierra a nuestro servicio

Fangoterapia, geotermia, arcilloterapia son conceptos que se utilizan para referirse al uso de arcillas medicinales, a la arcilla como elemento curativo.

Imposible no remontarnos a la historia. La arcilla y sus usos medicinales son tan antiguos como la humanidad. Todas las civilizaciones han empleado las propiedades de la arcilla, la tierra y el barro, como remedio natural para numerosas dolencias. Antiguos documentos demuestran que se ha utilizado para curar todo tipo de afecciones, heridas y problemas inflamatorios.

En el antiguo Egipto, los médicos utilizaban los fangos calientes del Nilo para curar diferentes dolencias y deformaciones reumáticas. Los embalsamadores utilizaban la arcilla en el proceso de momificación, ya que conocían sus principios purificadores. También los médicos griegos y árabes conocían sus virtudes y la utilizaban. En tanto, los griegos la utilizaban para el tratamiento de las fracturas.

Vivir cerca de volcanes, lagunas o mares era un privilegio para poder utilizarla para calmar el dolor, que en ese momento no se sabía que que se trataba de dolores reumáticos. Con el tiempo fueron también observando beneficios sobre la piel. 

El cuerpo humano y la tierra presentan la misma composición química: carbono, oxígeno, nitrógeno (los elementos principales de la vida) y, en menor medida, minerales y oligoelementos como azufre, cloro, sodio, potasio, magnesio, calcio hierro, cobalto, manganeso, cobre y cinc. 

A medida que envejecemos los minerales en nuestro cuerpo se van perdiendo, por ello es fundamental aportarlos externamente. 

Además, en el barro encontramos dos elementos básicos de la vida: agua y tierra. Nuestro cuerpo los siente afines porque también somos eso, agua y tierra.

Beneficios de las arcillas en la salud

• Poder antiinflamatorio: para inflamaciones producidas por golpes o picaduras. Desinflama y refresca la zona por su capacidad de absorber el calor, favoreciendo la circulación sanguínea.
• El cataplasma de barro sobre el abdomen absorbe el calor excesivo. Descongestiona los órganos internos como hígado, intestino, riñón, estómago (es muy útil cuando hay acidez).
• Por su capacidad de absorción y adsorción, extrae toxinas de la piel.
• Por su acción purificadora, trabaja sobre abscesos y forúnculos.
• Al ser antiséptica, la arcilla inhibe el desarrollo de elementos patógenos y logra la  eliminación de los mismos.
• Ayuda a la cicatrización de llagas, heridas, úlceras, por su capacidad regenerativa de la piel.

¿Qué arcilla utilizar?

Existen varios tipos de arcillas, aquí les describo algunas:

ARCILLA VERDE

• Tiene una gran capacidad anti-inflamatoria, depurativa y equilibrante del cebo. 
• Debe su color a los óxidos de hierro ferroso y de magnesio. Es muy rica en oligoelementos. 
• Tiene una gran capacidad de absorción, regulando el exceso de grasa, y es altamente purificante, por lo que está particularmente indicada para pieles grasas y mixtas.
• Es la arcilla ideal para tratar pieles acneicas.

ARCILLA BLANCA O CAOLÍN

• Grandes propiedades depurativas, antiinflamatorias y antibacterianas. Además, es un gran cicatrizante y ayuda a regular el ph intestinal.
• Se utiliza en uso interno para ayudar a regenerar la flora intestinal y también en caso de gastritis, úlceras y hernias de hiato.
• Ayuda a combatir el estreñimiento, además es beneficioso en piernas cansada (se puede colocar sobre las piernas).
• Ayuda a eliminar impurezas de la piel, recomendable para pieles secas, aporta luminosidad y deja la piel suave.
• Se utiliza en muchos preparados cosméticos naturales como pastas dentales y desodorantes.

ARCILLA ROJA

• Debe su color a un mayor contenido de hierro y aluminio, lo que le otorga propiedades astringentes, antiinflamatorias y descongestivas.
• Se usa en casos de rigidez e inflamación, como agente movilizador. Es muy indicada para problemas circulatorios y cuando hay presencia de calor localizado en una zona. 
• Se recomienda su uso para pieles sensibles con dermatitis o reacciones dérmicas a repetición. 
• También es la más recomendada para celulitis, aplicándola típicamente sobre las piernas.

¿Cómo se utiliza? 

1. Colocá unas cucharadas de la arcilla elegida con un poco de agua. 
2. la idea es formar un barro que me voy a colocar sobre la zona de interés. 
3. Espero a que se seque y luego retiro el barro.

Este paso a paso lo pueden hacer las veces que necesiten.